domingo, 22 de enero de 2012

YO NUNCA ESTUVE ALLÍ




No nací en una tierra de agostos calcinados
donde la lluvia duerme sus promesas
y el infierno, se toca con las manos.
No fue el hambre un invitado
asentado feroz en mis entrañas,
ni me dolió la piel en un mordisco interminable.

Yo siempre tuve vendas para cubrir la herida.
Mis sueños no volaron tras un pozo.

Nunca estuve allí
donde el futuro dura apenas un minuto,
sólo un paso más, otra mañana
cubierta de fieras y de picas.

No sentí la belleza aguda como un filo
que se ahoga en la nostalgia
de un ojo que la mire,
porque el ojo y la mano, el propio hueso
caminan tercos buscando la quimera
de un esquivo remanso de agua dulce.

Yo nunca estuve allí.
Yo aún puedo mirar hacia otro lado.
Caminar al margen del desierto,
del dolor, de la sequía, 
del ciclo feroz de su terrible calendario.

Del libro "Uni-versos para Somalia"

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buena la presentación del libro Uni-versos para Somalia y excelnte trabajo de Marcos y el resto de las personas que participaron.
Este poema es una perfecta muestra.


Saludos

Esperanza dijo...

Una realidad que no debería existir, a la que desgraciadamente nos hemos acostumbrado a observar de lejos, cuando nosotros, que podemos en la medida de nuestras posibilidades, deberíamos ayudar a paliar.
El libro es una iniciativa estupenda que merece el apoyo de todo por el esfuerzo que supone para los que la han puesto en pie. Y tu poema Cruz, un espejo del sentir de muchos.
Felicidades y espero que llegue más lejos de lo esperado, con el apoyo de todos.

PILARA dijo...

Es triste que necesitemos que nos recuerden, de vez en cuando, la realidad de muchos desfavorecidos.
Menos mal que hay un Marcos, que hay una Cruz dispuestos a dar sgenerosamente su tiempo, esfuerzo y bien hacer, como este poema tuyo.

Marcos Callau dijo...

Estupendo poema el tuyo, Cruz...para quitarse el sombrero. Es crudo y real. Enhorabuena y mil gracias por tu colaboración.

Anónimo dijo...

El poema es estupendo al igual que la autora.
Si fuera verdad que con poemas se pudiera hacer frente a la miseria, habría que estar escribiendo todo el día.
javier